Salón Internacional del Vino y las Bebidas Espirituosas
Un año más, unos cuatro mil productores viajaron a Verona para asistir a Vinitaly, uno de los acontecimientos más importantes para el sector vitivinícola italiano.
Gracias al creciente apoyo político, la presentación tuvo lugar el 20 de marzo en Bruselas, en la sede del Parlamento Europeo, con el objetivo de resaltar aún más el alcance del evento.
Las cifras, un 20% superiores a las de la pasada edición, dan fe de la capacidad de promoción global de esta marca ferial que permite a las empresas expositoras entrar en contacto con una amplia selección de compradores internacionales.
Los actores de la demanda extranjera seleccionados proceden de 65 países, a los que se calcula que se sumarán unos treinta mil operadores extranjeros.
El objetivo es ofrecer un objetivo estratégico a las empresas que invierten en la exposición y crear verdaderos mercados de exportación.
Para nosotros, consultores, Vinitaly es siempre una oportunidad de conocer a nuestros clientes, degustar los nuevos productos que se ofrecen y participar en seminarios científicos y conferencias impartidas por los mayores expertos del sector.
La diversidad de competencias y contactos se renueva cada año, dejándonos siempre gratamente impresionados por esta feria de negocios.
Una encrucijada internacional de tendencias capaz de representar bien la evolución del sector y las necesidades del mercado, poniendo de relieve el Made in Italy.
De hecho, la exposición incluye pabellones dedicados al vino ecológico, a las pequeñas producciones de nicho, a los licores y espirituosos, así como a las denominaciones más representativas del panorama vinícola italiano.
También para este 2024, los amantes del vino podrán participar en eventos específicos organizados en el centro de la ciudad: exposiciones, charlas sobre el vino y degustaciones dirigidas por periodistas enogastronómicos.
El formato dedicado al enoturismo da la medida de hasta qué punto, en los últimos años, este fenómeno se ha convertido en parte integrante de los activos estratégicos de las bodegas y, en consecuencia, de los planificadores que tienen la delicada tarea de diseñar espacios adecuados de recepción, degustación y venta.